EL PODER DE LA RESURRECCIÓN
Palabras clave:
PODER, RESURRECCIÓN, EL PODER DE LA RESURRECCIÓN, sacrificio, crucificciónSinopsis
Después de la muerte de Jesús, Él mismo descendió al infierno y arrebató las llaves que le habían sido robadas a la iglesia. Al hacerlo, recuperó lo que le pertenecía. En el cielo se cantaba un cántico nuevo: "Digno eres de tomar el libro y abrir sus sellos, porque fuiste inmolado, y con tu sangre nos redimiste para Dios, de toda tribu, lengua, pueblo y nación. Nos has hecho reyes y sacerdotes para nuestro Dios, y reinaremos sobre la tierra."
Vi entonces a miles de ángeles alrededor del trono, junto con los seres vivientes y los ancianos, proclamando con gran voz: "El Cordero que fue inmolado es digno de recibir poder, riquezas, sabiduría, fortaleza, honra, gloria y alabanza."
Jesús, al tomar las llaves, restauró lo que había sido robado. Cuando el enemigo pensó que había vencido, Jesús le arrebató el poder y restauró nuestra autoridad.
Como iglesia, a veces pedimos a Dios que haga algo, pero Él ya lo hizo. Ya envió a Su Hijo a morir por nosotros. Al decir AMÉN, estamos afirmando que entendemos el sacrificio de Jesús, el poder de Su resurrección, y vivimos en la supereminente grandeza de Su fuerza.
AMÉN es más que una palabra de cierre; es una declaración de fe y un recordatorio de la victoria que ya tenemos en Él.
